DAMIÁN SUDANO, PRESIDENTE FEFARA
Una larga tradición de trabajo y compromiso
La celebración de estos primeros sesenta años de vida, además de traer del recuerdo tantas vivencias compartidas en defensa de nuestra profesión, donde el Colegio fue y es pilar fundamental para la conducción y el funcionamiento de FEFARA, me ha generado la necesidad de detenerme un momento y repasar el actual estado de situación de nuestra profesión, como así también vislumbrar un futuro que ya asoma en el horizonte.
Una larga tradición de trabajo y compromiso en favor de la salud se vio como nunca reafirmada a partir de la actuación que nos cupo en la reciente pandemia de Covid 19, la cual ha logrado el unánime reconocimiento a nuestra labor por parte de las autoridades sanitarias y de la sociedad en su conjunto.
En estas circunstancias, todos y cada uno de nuestros profesionales farmacéuticos destacaron tanto por lo valioso y oportuno de cada intervención, como por la valentía de estar siempre dispuestos a ocupar esa primera línea de combate.
Por ello y por la rica historia de nuestra profesión, considero que a nadie deben quedarle dudas que la actividad de la farmacia, como extensión del servicio profesional que brinda el farmacéutico, es un servicio público. Como también que el profesional farmacéutico, por su formación, está capacitado para integrar (y liderar) equipos de trabajo en el ámbito de la salud, demostrando día a día su idoneidad y profesionalismo tanto en el ámbito público como privado en todo el territorio nacional.
Pero para que todas estas consideraciones se traduzcan en hechos concretos, resultará como siempre necesario poner nuestras mejores energías y apelar a los valiosos recursos políticos y de gestión que hemos sido capaces de construir, para enfrentar con posibilidades de éxito las amenazas que a diario se presentan y que hoy parecen multiplicarse.
Transitamos tiempos en los cuales la realidad nos exige reafirmar el valor de nuestra profesión, de manera especial cuando vuelven a brotar concepciones mercantilistas que pretenden asimilar nuestra tarea a una simple transacción comercial. Es necesario que trabajemos para valorizar la profesión como agente de salud.
De todos modos los desafíos no nos asustan, sino que nos motivan a la acción. Nacimos para trabajar por la permanencia y consolidación de nuestra red. Pretendemos constituirnos en un actor de peso en el mercado, gestionando nuestros contratos con la seguridad social, tanto sindicales y privadas como las provinciales. Creemos firmemente que éste es el camino que todas las instituciones debiéramos transitar.
En la hora actual resulta necesario también advertir que nuestro ámbito de actividad no puede ser la excepción para los modos y formas de relación que vienen instalándose en diversas actividades, mediante el ingreso de aplicaciones o soluciones tecnológicas en las transacciones. En respuesta a esta situación emergente, y procurando evitar la irrupción de actores ajenos al mercado del medicamento, hemos iniciado un trabajo conjunto entre todos los involucrados para lograr una respuesta global, poniendo a disposición de los usuarios una solución tecnológica propia del sector.
A manera de cierre y reafirmando nuestras permanentes convicciones, les quiero asegurar que cada uno de nosotros, desde el lugar que nos toque ocupar, seguiremos en la permanente búsqueda de cambios para poner a disposición una atención profesional integral e integrada en favor de la promoción, recuperación y preservación de la salud de quienes la requieran. Redoblaremos esfuerzos en defensa de un modelo de farmacia profesional de excelencia, sabiendo también que para lograrlo resultará imperioso apuntalar la actualización profesional que nos permita brindar una atención farmacéutica de calidad y rentada.
(Artículo publicado originalmente en la edición especial por el 60º aniversario del Colegio Farmacéutico de la provincia de La Pampa)